BUENOS AIRES.- El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, afirmó que Sara Garfunkel, la madre del fallecido fiscal Alberto Nisman, debió haber sido detenida tras el hallazgo en su domicilio de un arma similar a la usada en la muerte de su hijo, para determinar “qué es lo que sabe” en este caso.
Fernández, sentenció: “si yo hubiera sido fiscal, la hubiera detenido, y hubiera allanado hace 88 días, por lo menos” el domicilio de Garfunkel, “para ver qué sucedió y cómo se movilizaron” los familiares. “¿Qué hace la pistola en manos de la madre? ¿La madre, qué es lo que conoce? ¿Cuántas horas estuvo en el departamento? ¿Había una carta del fiscal? La presencia de esta arma, claro que cambia la situación, debe ser la primera vez que coincido con la jueza Arroyo Salgado”, expresó.
“Todos los elementos que hay indican que hay demasiadas cosas que pasaron cerca de la señora, que tienen que ver con ocultamiento de pruebas”. Apuntó sus sospechas sobre “la actitud de la señora”, al plantear que “los judíos tienen un mayor celo con los 30 días de duelo, se vive con una intensidad muy fuerte, mucho más fuerte que en el caso de los cristianos”.
En esa línea, planteó que “aún estando el cuerpo del doctor Nisman en la morgue, no se lo había sepultado, y fue la madre a las sucursales 15 y 17 del Banco Ciudad a abrir las cajas y llevarse todo. ¿Eso no llama la atención?”. (DyN)